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Salud familiar

La postura en el sofá para cuidar tu salud

La postura en el sofá para cuidar tu saludDespués de leer este artículo no volverás a sentarte en un sofá de la misma manera. Cierto es que, cuando se trata de liberar tensiones o abandonarnos a la comodidad de este mueble, no siempre tenemos en cuenta algunos aspectos importantes de nuestra postura, y lo que en un principio puede significar relajación y descanso apacible, muchas veces termina afectando nuestra salud y provocando serias afectaciones a nuestro cuerpo. Aquí te lo explicamos todo.

Postura saludable

¿Qué entendemos por una postura saludable exactamente? Las personas pudieran pensar erróneamente que se trata de asumir una actitud “robótica” cuando se sientan en el sofá, pero nada más alejado de la realidad. Sentarse correctamente en este tipo de muebles significa ciertamente erguir nuestra espalda y mantenerla alineada, pero de la forma más natural posible.

Nuestras piernas deberán sostener el peso del cuerpo equitativamente, al mismo tiempo que la cadera mantendrá un ángulo recto con respecto a nuestras rodillas. Todos estos aspectos se volverán primordiales a la hora de evitar molestias innecesarias y tensiones musculares. Si quieres dejar de sufrir dolores de espalda, no olvides tener en cuenta los siguientes consejos que te proporcionamos a continuación. 

De arriba hacia abajo

Comencemos por la cabeza y el cuello. Los respaldos de muchos sofás en nuestros hogares no poseen el tamaño adecuado, ya sea porque son demasiado altos, en cuyo caso nuestra cabeza se inclinará hacia delante resintiendo los músculos del cuello, o tal vez porque son extremadamente bajos, afectando los músculos de la nuca y entorpeciendo el correcto descanso de nuestra cabeza. En cualquier caso, y si queremos comprobar que estamos asumiendo la postura correcta, debemos asegurarnos que la cabeza siempre se encuentre alineada con la espalda", prosiguen.

La columna: principal víctima

Como mencionábamos al principio, no es necesario que nuestra columna se mantenga recta todo el tiempo, sino más bien respetar las curvaturas normales de las regiones lumbar y cervical. Una postura natural de la columna nos permitirá repartir equilibradamente el peso de nuestro cuerpo, y en cualquier escenario: sentados, semitumbados o completamente acostados, esta regla debe cumplirse sin excepciones. Para ello, deberemos verificar las dimensiones de nuestro sofá (entre los 90 y 100 centímetros de asiento se considera adecuado), de modo que la altura de fondo y el respaldo concuerden con nuestro cuerpo.

¿Sentado o tumbado?

Todos hemos experimentado alguna vez la comodidad tan grata que nos provee un sofá cuando nos tumbamos en él. Aun así, debes saber que este tipo de muebles no han sido diseñados para hacer de cama, por lo que conviene optar por sentarse adecuadamente y contribuir a nuestra higiene postural. No obstante, te aconsejamos que la próxima vez que decidas tumbarte en tu sofá recurras al empleo de cojines para la cabeza y la rodilla, de modo que tu cuerpo quede compensado y no sufra de tensiones excesivas. 

Cómo proteger la zona lumbar

Se trata del elemento clave a la hora de sentarnos en el sofá. Al igual que la zona cervical, la zona lumbar debe ser apoyada con cojines para nivelar nuestra posición con respecto al respaldo del sofá. Algunos modelos de sofá incluyen riñoneras viscoelásticas para suplir esta necesidad, pero por nuestra parte te recomendamos que siempre apoyes los pies en el suelo mientras fijas el peso del cuerpo a la zona pélvica y apoyas toda la espalda en el respaldo, tratando de cubrir el área vacía con cojines.

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Categorías: Salud familiar,
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