Los Omega 3 son ácidos grasos esenciales poliinsaturados; esto significa que el organismo humano no puede fabricarlos a partir de otras sustancias y que, por tanto, debemos incluirlos en nuestra dieta. Sin embargo, nuestros hábitos de vida diarios, y la alimentación descuidada que muchos de nosotros llevamos, consigue que la mayoría presentemos carencias de estos ácidos grasos tan elementales.
¿Dónde podemos encontrar estos nutrientes?
En principio, los ácidos grasos Omega 3 podemos encontrarlos en dos tipos de alimentos, los de origen animal y los de origen vegetal.
En cuanto al primer grupo de alimentos, el pescado azul es una buena fuente de ácidos grasos Omega 3. Es decir, deberíamos incluir en nuestra dieta, al menos dos veces por semana, pescados como el atún, bonito, sardina, trucha, emperador o salmón. El aceite de pescado es el más rico en ácidos grasos Omega 3.
En cuanto a los segundos, los alimentos de origen vegetal ricos en Omega 3 no son muy comunes en nuestra dieta, ya que destacan las semillas de lino, las semillas de chía, el sacha inchi, o los cañamones. Sin embargo, las nueces también son un alimento rico en Omega 3, y en este caso, sí nos resultará más sencillo incorporarlo a nuestra alimentación diaria. Hay otras fuentes vegetales, como la lechuga o las espinacas, pero la cantidad de Omega 3 de éstas no es significativa.
Para evitar cadencias en el organismo de este ácido graso, cada vez son más los alimentos enriquecidos, entre los que destacan los productos lácteos. Si no consumimos la cantidad suficiente de este nutriente, otra opción es incorporar a nuestra dieta suplementos alimenticios ricos en Omega 3, en especial los que se realizan en base al aceite de pescado, como leemos en este artículo de HSN, portal especializado en nutrición, salud y deporte.
¿Qué propiedades tienen los ácidos grasos Omega 3?
La principal característica del Omega 3 es que aumenta el tiempo de coagulación de la sangre. Su efecto es tal que, en las comunidades en las que el pescado es un alimento básico en su dieta, apenas se dan problemas cardiovasculares, como sucede entre japoneses o inuit.
Sin embargo, el Omega 3 también influye en la formación de las membranas celulares, en el correcto funcionamiento del sistema inmunológico, en la formación de la retina y de las hormonas e influye también en el correcto funcionamiento del cerebro. Estas propiedades explicarían por qué es esencial en nuestra dieta.
¿Qué indicaciones terapéuticas tiene el Omega 3?
Aunque las indicaciones terapéuticas debes estar siempre recomendadas por un médico, por norma general los ácidos grasos Omega 3 influyen en: