8 dudas más frecuentes sobre los injertos capilares

Entre los tratamientos médicos más frecuentes, los injertos capilares son unos de los que mayores dudas presenta por parte de los pacientes. Existen decenas de mitos, falsas mentiras, erratas y, sobre todo, miedo. Con el paso de los tiempos la medicina, en este como en muchos otros ámbitos, ha evolucionado hasta el punto de convertir los procedimientos capilares en algo inofensivo, que da buenos resultados, además de ayudar mucho a la autoestima de los pacientes.

Sin embargo, aún con la conciencia de esto, las personas continúan reticentes a la hora de enfrentar la decisión de plantarse dicho proceso, ¿a qué se debe? La cultura popular ha generado cierto estigma en los individuos con injertos capilares, creando miedo y desinformación ¿Sabías que existen dos tipos de pacientes cuando de injertos capilares se refiere? ¿Conocías las Clinicas capilares en turquía? ¿Sabes que dicho país se ha convertido en la capital mundial de este procedimiento? Para quien aún se encuentra dubitativo, hicimos el siguiente texto donde mostramos las ocho dudas más frecuentes sobre los injertos capilares. Esperamos que después de leerlo en su totalidad, tus incertidumbres queden subsanadas.

1. FUSS vs FUE

FUSS se refiere a los pacientes que presentan grandes áreas de alopecia. Usualmente la perdida total del cabello o algún accidente donde se ve comprometida el área de la cabeza, son los motivos de que una persona reciba grandes cantidades de injertos capilares. Cuando la zona del trasplante es localizada, como en el caso de cicatrices o pequeñas áreas que muestren alopecia, a estos pacientes se les denomina FUE. Según se necesite (áreas extensas o zonas pequeñas) la técnica FUSS o FUE, ayudará al paciente de manera segura.

2. ¿Duele?

Una de las dudas más frecuentes, y por la cual muchas personas desisten, es la cuestión del dolor. Tenemos una buena noticia: NO DUELE. Debido a la evolución en la técnica, ya sea con FUSS o FUE, no te dolerá en ningún momento del procedimiento.

3. Edad?

Muchas personas llegan con la siguiente duda a los consultorios ¿Es la edad algún tipo de impedimento para realizarse un trasplante capilar? La respuesta es no. Solo basta con que goces de buena salud y la zona donde se efectúe la donación sea indicada. Aunque es verdad que, usualmente, este tipo de intervenciones se hacen entre los treinta y cuarenta años, con el afán de prevenir futuras alopecias.

De igual modo se tiene la duda sobre desde qué edad puede someterse alguien a dicho procedimiento. Aunque es factible realizar un injerto capilar a partir de cualquier edad, los médicos prefieren hacerlo entre los veinticinco o treinta años, con el ambición de realizar un seguimiento eficiente.

4. Procedencia del cabello

Quizá esta sea la pregunta que más curiosidad y miedo genera en las personas ¿De dónde procede el cabello de los injertos? Es en el área occipital, así como en el temporal de tu cuero cabelludo, donde no influye la acción genética y hormonal, por este motivo de estas áreas se realizan la extracción del cabello. En caso de que no sea posible por la poca cantidad, se puede extraer de tus piernas, barba o pecho, a este procedimiento se le denomina trasplante de pelo corporal.

5. Duración?

Según de la técnica que se utilice dependerá la duración del proceso. De tres a seis hora con FUE; de seis a doce horas con FUSS.

6. Cabello de otra persona?

No, es imposible que se te trasplante de otras personas ya que esto puede generar rechazo.

7. Recuperación?

Al ser un procedimiento menor en el cual se aplica anestesia local, no hay necesidad de que el paciente sea internado en un hospital. Sin embargo, se aconseja unos días de reposo.

8. Cuidados y resultados?

Después del proceso se le proporcionará al paciente una solución salina la cual debe aplicarse en el cuero cabelludo, mantener las zonas del trasplante bien hidratadas ayudará a que los folículos se activen y surta efecto el procedimiento. Productos como champús neutros serán útiles a la hora de prevenir infección y acelerar la cicatrización. En el primer mes los cabellos injertados se caerán, esto es algo común ya que el cuero cabelludo se adapta y, a partir del tercer mes, comienza el nuevo crecimiento.