Cada vez son más las personas y empresas que se preocupan por el medio ambiente. Por ese motivo, los envases biodegradables cada vez tienen más demanda.
Si quieres saber más sobre ellos, a lo largo de este artículo vamos a dar respuesta a las preguntas más comunes. Así podrás ver los beneficios que ofrecen y así te sentirás más animado a usarlos, tanto si eres particular o empresa.
Los productos biodegradables son elaborados a base de un material que se puede descomponer de manera natural. Esa descomposición se realiza a través de microorganismos naturales. Eso quiere decir que el producto biodegradable con el paso del tiempo y la actividad de bacterias y hongos pueden transformar el material en nutrientes, biomasa, agua y dióxido de carbono.
Un material biodegradable permite que el ecosistema funcione correctamente, ya que se reciclan los nutrientes una vez que el material ha dejado de hacer su función. Por supuesto, el material que se descompone no deja residuos tóxicos. Si lo hiciese ya no podría ser considerado como material biodegradable.
Otro punto positivo de los materiales biodegradables es que no provocan basura. En su descomposición se transforman, por lo que no pueden ser considerados como basura.
El plástico tradicional no es biodegradable, aunque sí se están elaborando plásticos biodegradables. Son los que se elaboran a base de maíz, trigo o patatas entre otros materiales.
Pero a pesar de que podrían ser una buena opción, hay que tener en cuenta de que estos plásticos biodegradables cuentan con algunos problemas que merece la pena destacar.
El plástico biodegradable tarda mucho menos en degradarse en la naturaleza, pero aun así tarda unos tres años. Eso provoca basura que en algunas ocasiones puede llegar a ser molesta. Aunque es verdad que si tenemos en cuenta que el plástico tardaría más de trescientos años en desaparecer… podemos ver que el plástico biodegradable sí que puede ser una buena opción.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que el plástico biodegradable no se puede reciclar junto al clásico. Eso hace que no se pueda juntar y la tarea de reciclaje se complica bastante.
En la actualidad hay muchos materiales biodegradables, pero es verdad que no todos se usan de igual manera.
Algunos ejemplos de materiales biodegradables son:
Gracias a que la variedad de materiales es muy amplia, eso hace que podamos encontrar una amplia variedad de productos biodegradables. Si nos lo proponemos, podemos ser un poco más ecológicos y ayudar al planeta.
En la actualidad hay muchos envases biodegradables entre los que podemos elegir. Por ejemplo, en el mundo de la hostelería, cada vez son más empresas las que optan por esos envases para ser un poco más ecológicos.
Analizando la web de https://hostelbio.com/, nos damos cuenta de que hay una amplia variedad de productos biodegradables de un solo uso para la hostelería. Te vamos a mostrar algunos ejemplos para que puedas darte cuenta de que, si te lo propones, también puedes poner tu granito de arena.
Esos son algunos de los envases más conocidos. Pero hay que tener en cuenta que hay muchos otros productos que están dejando el plástico a favor de los materiales biodegradables. Un ejemplo claro son las pajitas, las cuales ya no se pueden comercializar en plástico. Y a pesar de ser de materiales biodegradables, son igual de cómodas y elegantes como las de antes.
A pesar de que se suelen usar como una misma palabra, la verdad es que los dos términos no significan lo mismo. Por ese motivo, vamos a mostrarte una serie de claves a través de las cuales te resultará más fácil diferenciarlos.
¿Qué es ecológico?
También conocido como producto verde, es un término que va unido al consumo responsable de productos ecológicos y sostenibles. Para poder ser ecológico, es necesario que la naturaleza no sufra ningún impacto.
¿Qué es biodegradable?
Son las cosas que con la actividad natural de la naturaleza se pueden degradar sin problemas. Se presentan como una gran opción frente a los productos elaborados con plásticos provenientes del crudo.
Y ahora vamos a responder a la pregunta, ¿Cuál es la diferencia entre ecológico y biodegradable? Según los expertos, lo mejor es usar la palabra biodegradable o sostenido. Eso se debe a que, en la elaboración de las cosas, no hay nada que pueda ser 100% ecológico, ya que todo afecta más o menos en la naturaleza. Para evitar problemas, lo mejor es optar por la palabra sostenible, en cuyo caso se expresa que es un material bueno para el medio ambiente.