Normalmente la vía urinaria, salvo el meato u orificio urinario, es estéril, por lo tanto la presencia de gérmenes, especialmente bacterias, siempre es anormal. Sin embargo no siempre que hay bacterias hay una infección. Es por eso que en los cultivos de orina siempre aparece un número de colonias, estimándose como infección del tracto urinario, cuando hay más de 100.000 colonias bacterianas. Cuando hay menos de esta cifra se habla de bacteriuria. |
Las enfermedades asociadas son un factor predisponente para la infección urinaria en ancianos, entre otras cosas, por la necesidad de usar instrumentos en la vía urinaria. Las enfermedades más frecuentemente asociadas son: demencias (enfermedad de Alzheimer), enfermedad de Parkinson y lesiones del sistema nervioso central que provocan una falta de control de los nervios sobre la vejiga (vejiga neurogénica), incontinencia urinaria, incremento en el volumen remanente tras el vaciado vesical, dificultad en el vaciamiento urinario, e incremento en la frecuencia del reflujo vesico-ureteral. También la diabetes mellitus ocasiona predisposición a la infección del tracto urinario como consecuencia de la neuropatía diabética, de las alteraciones inmunitarias, de la microangiopatía y de la ya mencionada necesidad de instrumentalizar la vía urinaria. El crecimiento prostático es un factor causal de bacteriuria en el hombre anciano. La litiasis de la vía urinaria aumenta la incidencia de infecciones urinarias por mecanismos obstructivos al flujo urinario, así como también por lesión de la mucosa y por acantonamiento de gérmenes en los propios cálculos. |
La decisión del tratamiento de una ITU en el anciano, así como su duración, tipo de antibiótico, vía de administración, dosis a emplear, etc., no es una receta de cocina, por lo que lo ideal es que cada centro aplique el conocimiento de acuerdo a su realidad (resistencias conocidas), sus gérmenes más frecuentes y las eventuales complicaciones por esta causa. ¿Hay que usar antibióticos siempre? Algunos estudios han demostrado que el tratamiento con antibióticos de la bacteriuria asintomática en ancianos, sólo consigue una mayor adquisición de resistencia por parte de dichos gérmenes. De hecho, al poco tiempo de haber tratado muchas bacteriurias aparece recidiva o reinfección y los periodos entre estas recurrencias se hace más breve. Muchos estudios han demostrado que el tratamiento de una bacteriuria asintomática en ancianos no mejora la supervivencia, pero no es claro si mejora la calidad de vida del enfermo. |
Estudios efectuados en las dos décadas pasadas, atribuían a la infección urinaria una asociación con la disminución en la supervivencia de las personas mayores que las padecían. Sin embargo investigaciones más recientes, no han logrado comprobar dicha observación, menos aún en ancianos que viven en la comunidad. Sin duda que independiente de la supervivencia, habrá una mejor calidad de vida en los ancianos que no tienen este tipo de infecciones, y muchas veces una simple Infección Urinaria puede ser el inicio de una serie de complicaciones en una persona mayor. |
Dr. Victor Hugo Carrasco Meza |