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Otorrinolaringología

Hipoacusia: síntomas, características y tratamiento

Hipoacusia: síntomas, características y tratamientoLa hipoacusia o discapacidad auditiva afecta a aproximadamente el 5% de la población mundial, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En España, se estima que un 10% de las personas tiene algún tipo de discapacidad auditiva.

Se considera que la pérdida de la audición es una discapacidad cuando en adultos mayores de 15 años, la pérdida es de 40 dB o más. Por su parte, en niños y adolescentes se considera que hay hipoacusia cuando el nivel de pérdida de la audición supera los 30 dB.

Las personas mayores de 65 años son el grupo etario más afectado por esta discapacidad, siendo la tercera de las enfermedades crónicas más comunes. La OMS estima que más del 50% de la pérdida de la capacidad auditiva podría ser prevenida y que se debe mantener un adecuado cuidado de la audición.

Tipos y grados de hipoacusia

La hipoacusia se clasifica en diferentes tipos con base a su origen así como en distintos grados con relación al nivel de la pérdida de la audición. A continuación se presenta esta clasificación:

Tipos de hipoacusia

De transmisión o conducción: la afección ocurre asociada a la parte mecánica del oído que involucra tanto al oído externo como el medio. En este caso se puede ver afectado el tímpano y se asocia a patologías como otitis, traumatismos o malformaciones, entre otros.

Neurosensorial o perceptiva: la lesión que afecta la audición se ubica en el oído medio y/o interno. En el oído interno pueden ocurrir alteraciones en el nervio auditivo, vías neuronales en el sistema nervioso, la cóclea, células ciliadas internas o externas, encargados de enviar el sonido al cerebro. 

Mixta: cuando se encuentra alterado tanto el nervio auditivo como el oído medio. Igualmente, puede estar involucrado un daño al oído externo.

Grados de la hipoacusia

Leve: la persona tiene dificultad para entender las palabras y no percibe algunos sonidos agudos. Su umbral de audición se encuentra entre los 21 y 40 dB.

Moderada: se dejan de escuchar palabras, se percibe sonidos entrecortados y la persona tiene dificultad para llevar una conversación, particularmente en zonas ruidosas. Su umbral se ubica entre los 41 a 70 dB.

Grave: se escuchan solo palabras sueltas y algunos sonidos ambientales, siendo casi imposible sostener una conversación. El nivel de audición va de 71 a 90 dB.

Profunda: solo se llegan a percibir sonidos muy fuertes, por lo que la persona ha perdido casi totalmente la audición. El umbral se encuentra ente los 91 a 119 dB.

Cofosis: cuando se llega a este nivel de hipoacusia, se ha perdido totalmente la capacidad auditiva. El umbral de audición es de 120 dB o superior.

Causas de la hipoacusia

La pérdida de la audición se asocia a diversos factores que van desde los genéticos hasta sufrir infecciones o traumatismos. Entre algunas de las causas más comunes están:

Factores hereditarios: un 40% de los problemas de audición en niños pueden ser heredados. No obstante, un gran número de los menores con hipoacusia vienen de padres normoyentes.

Infecciones virales: la meningitis o la exposición al citomegalovirus pueden afectar el funcionamiento del oído. Asimismo, las otitis recurrentes y con tratamientos inadecuados llevan a una pérdida importante de la audición.

Envejecimiento: a medida que las personas tienen más edad, van perdiendo de forma natural su capacidad auditiva. Así, más del 40% de las personas mayores de 60 años y un 90% de adultos con más de 80 años, presentan algún grado de hipoacusia.

Diabetes: las personas que padecen esta enfermedad tienen una posibilidad de un 20% de desarrollar algún grado de hipoacusia.

Traumas acústicos: cuando una persona es sometida a sonidos muy fuertes por un tiempo prolongado, puede perder parte de su audición. Esto afecta particularmente a los jóvenes, ya que al menos un 50% está expuesto a ruidos muy elevados. Se estima que estar sometido a un nivel de ruido de 85 dB por más de ocho horas o 100 dB por 15 minutos, puede generar algún grado de hipoacusia.

Síntomas de la hipoacusia

Si sospechas que tú o algunos de tus familiares, sufre de pérdida de audición, es conveniente tomar en cuenta algunos síntomas. Los más característicos son:

  • Dificultad para percibir las palabras en una conversación con dos o más personas.
  • No se diferencian los sonidos agudos entre ellos.
  • Problemas para diferenciar las consonantes cuando te hablan.
  • Se perciben mejor las voces masculinas que tienen menos tonos agudos.
  • Tener necesidad de que las personas hablen más lento a fin de comprender lo que dicen.
  • Sentirse mareado o con sensación de pérdida del equilibrio.
  • Tener sensación de presión en el oído o percibir zumbidos de forma constante.

¿Cómo prevenir la hipoacusia?

Tal como comentamos anteriormente, la OMS estima que un 50% de los problemas de hipoacusia se pueden prevenir. En este sentido, se estima que 31% de la hipoacusia infantil se debe a enfermedades infecciosas, un 17% a problemas con los cuidados perinatales y 4% a administración de medicamentos que son ototóxicos.

Todas estas causas pueden ser prevenibles si se colocan vacunas a los menores, se dan los cuidados adecuados. Asimismo, es de gran importancia realizar audiometrías infantiles tempranas para tratar a tiempo los problemas de audición.

En cuanto a la hipoacusia debida a traumas acústicos, se puede prevenir fácilmente utilizando la protección adecuada en el medio laboral. En el caso de los jóvenes, se deben realizar campañas de concienciación a fin de que entiendan el riesgo auditivo de escuchar la música a decibelios elevados y durante largo tiempo.

Tratamiento para la hipoacusia

Cada tipo de hipoacusia tiene causas diferentes, por lo que se utilizan diversos tratamientos para mejor la capacidad auditiva del paciente. Los más comunes son:

Eliminar tapones de cerumen: estos pueden ser causa de una pérdida de la audición temporal. Para esto, el médico utiliza distintas herramientas a fin de extraer el tapón sin causar daños al oído.

Uso de audífonos: este es el tratamiento más ampliamente utilizado y es colocado por un audiológo. Actualmente hay distintas tecnologías que puedes consultar en Audicostaudifonos y van desde audífonos personalizados que se adaptan al canal auditivo de cada persona hasta los inalámbricos, bidireccionales y que responden a tecnologías de procesamiento de voz.

Implantes cocleares: cuando la hipoacusia es grave, puede que los audífonos no sean suficientes y se puede realizar un implante coclear. El mismo estimula directamente el nervio auditivo, sin pasar por las partes dañadas del oído.

Realización de procedimientos quirúrgicos: si la causa de la hipoacusia es debido a deformaciones en el tímpano o los osículos auditivos, es posible corregirlo mediante cirugía. También se pueden insertar pequeños tubos que ayuden a drenar los oídos que acumulan líquido de forma persistente.

Tratamientos farmacológicos: algunos tipos de hipoacusia pueden responder a algunos medicamentos. Por ejemplo, cuando son causadas por otitis crónicas o por oteoesclerosis. Igualmente, algunos casos de sordera súbita son tratados con corticoides.

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