Si denominamos enfermedades ocupacionales a todas aquellas que pueden tener alguna relación con el ambiente en el lugar de trabajo, estas pueden clasificarse en dos grandes grupos.
¿Que es la neumoconiosis?
Se define como Neumoconiosis el conjunto de enfermedades pulmonares resultante de la inhalación y acumulación de polvo inorgánico, así como de la reacción que se produce en el tejido pulmonar como consecuencia de las partículas depositadas.
Se deben cumplir, por tanto, tres circunstancias:
Exposición a polvo inorgánico
Tamaño de la partícula adecuado para alcanzar directamente el alvéolo y no quedar atrapada en la vía aérea superior.
Tiempo de exposición prolongado para que se acumule una cantidad suficiente de partículas.
¿Cómo se produce esta enfermedad?
La producción de la enfermedad depende de la dosis de partículas inhaladas y retenidas, de la actividad biológica del polvo para inducir una reacción tisular fibrogenética y de la respuesta y sensibilidad individual.
Cuando una partícula inhalada penetra en el árbol respiratorio el sistema respiratorio intenta defenderse a través de sus mecanismos defensivos como la tos, el sistema mucociliar, etc.
El comportamiento de una partícula en las vías aéreas depende del equilibrio entre su proceso de depósito y la situación estructural y funcional del aparato respiratorio del sujeto afectado.
El tamaño de las partículas es el factor que más influye en el depósito de la misma. De forma general, se considera que las partículas con un diámetro mayor de 8 um se depositan en la orofaringe, las de 5-8 um en las grandes vía aérea, y las de 0,5 a 5 um en los alvéolos y en las pequeñas vías aéreas. Las que tienen un tamaño alrededor de 0,3 a 0,5 um nos e depositan y se expulsan con al espiración.
En un ambiente minero o industrial la mayoría de las partículas de polvo inhaladas son retenidas por encima del bronquiolo terminal, ya que predominan aquellas cuyo diámetro oscila entre 2 y 12 um.
Concentración de partículas. El sistema de aclaramiento alveolar es capaz de tolerar hasta 500 a 1000 partículas por cc de aíre. Si la concentración es mayor se empiezan a acumular.
Se ha calculado que una exposición continua a partículas inertes de 4 um de diámetro requiere 293 días para alcanzar una situación de equilibrio. Cuando la exposición es intermitente, como sucede en las enfermedades laborales, son necesarios cinco años para alcanzar el equilibrio. Es por tanto evidente que en la mayoría de las Neumoconiosis son necesarios muchos años de exposición para que la enfermedad se desarrolle, entre diez y quince años como mínimo. En algunas ocasiones se presentan casos agudos con periodos de exposición muy cortos (uno o dos años) o de evolución intermedia (dos a cinco años) y se piensa que en estos casos estaría relacionado con una mayor susceptibilidad individual.
Entre las propiedades intrínsecas de la partícula, la forma es un factor determinante de su depósito, puesto que las partículas alargadas se depositan en mayor cantidad, la carga eléctrica, la composición de la partícula, etc. son otras propiedades intrínsecas que determinan el mayor o menor depósito de las mismas.
Que partículas producen neumoconiosis?
Las alteraciones que produce en el pulmón las neumoconiosis dependen del tipo de partículas inhaladas y de la intensidad de la exposición. En la tabla I se exponen las principales Neumoconiosis, clasificadas de acuerdo a la composición química de las partículas y correlacionadas con las actividades profesionales en las que suele darse cada una.
Diagnótico de las neumoconiosis
La historia laboral permite establecer la posible relación causa efecto y conocer los detalles en cuanto a tiempo de la exposición, tiempo e intensidad de la misma.
La exposición a un polvo inorgánico puede ser determinada mediante la historia laboral, controles del medio laboral y determinaciones ambientales. El grado de exposición determinado por estos medios es un reflejo de la dosis acumulada, que no puede ser medida en sujetos vivos.
Se ha comprobado que existe una a relación entre la exposición y la respuesta. Aunque también se han apreciado excepciones a esta relación.
Para confirmar el diagnóstico es preciso realizar una serie de pruebas:
Técnicas de imagen y en concreto la radiografía de tórax es le medio por le que generalmente se establece la sospecha diagnostica. Para ello, se relacionan las alteraciones presentes, en general bastante características, con los antecedentes profesionales.
Las prueba de imagen junto a la exploración funcional respiratoria realizada para conocer el grado de afectación funcional son los parámetros que habitualmente se utiliza para la valoración médico-legal de la enfermedad. Para ello se siguen los criterios establecido por la Organización Internacional del Trabajo, que ha elaborado una clasificación basada en el tamaño, forma y extensión de los nódulos, así como de otros hallazgos adicionales.
El TAC de alta resolución es otra de las pruebas que se solicitan para discriminar las lesiones pulmonares de las pleurales, determinar la extensión de la afectación y valorar le enfisema asociado.
La Gammagrafía con Galio 67 puede ser útil para valorar la actividad de la enfermedad.
Por tanto, el diagnóstico de presunción se establece, ante alteraciones radiológicas incipientes y/o reducción de la capacidad de difusión determinada mediante una prueba de función pulmonar específica.
El diagnóstico de certeza, es el resultado de la concurrencia de una historia laboral de suficiente exposición y la presencia de lesiones radiológicas típica. No son precisos por tanto la identificación del polvo ni biopsiar el pulmón para demostrar la existencia de la enfermedad, salvo que sea preciso por problemas médico-legales.