La dieta mediterránea es una de las formas de alimentación más saludables que existen. Si quieres cambiar tu alimentación, empezar a cuidar tu salud y aprovechar todos los beneficios que este tipo de dieta puede ofrecerte, te recomendamos continuar leyendo para valorar todo lo que la dieta Mediterránea puede hacer por tu salud.
La dieta mediterránea es un tipo de alimentación basada en el consumo de alimentos frescos y totalmente naturales como las frutas, las verduras, el aceite de oliva, los vegetales, los frutos secos, los cereales saludables, los pescados, la carne magra y el queso. La dieta mediterránea no incluye productos industrializados o ultra procesados como las comidas prefabricadas.
Se trata de un tipo de alimentación que te permitirá llevar un estilo de vida mucho más saludable, controlar mejor tu peso y mejorar tu metabolismo. Este tipo de alimentación se basa en la cocina tradicional de Italia, España, Grecia y otros países que rodean el mar Mediterráneo, teniendo en cuenta sus productos autóctonos y la gran calidad y variedad de su cocina saludable.
En este tipo de alimentación se priman los alimentos de origen vegetal, las verduras, las frutas, los cereales integrales, las legumbres, los frutos secos, las hierbas, las semillas y las especias como base de la dieta. Al mismo tiempo, el aceite de oliva suele ser la principal fuente de grasa saludable para este tipo de dieta. Además, en la dieta mediterránea se incluye también, de forma moderada y saludable, el pescado, el marisco, la carne de ave o carnes magras y los lácteos, evitándose la carne roja y los dulces, que serán siempre caseros y se consumirán de forma ocasional.
Asimismo, cabe reseñar también que el vino suele asociarse con la dieta mediterránea. En este aspecto, cabe reseñar que podemos incluirlo en este tipo de dietas, pero siempre con moderación, ya que puede ser interesante para reducir el riesgo de padecer enfermedades cardíacas en algunos supuestos, pero entraña otros peligros para nuestra salud que no deben descuidarse.
Para llevar el estilo de vida de la dieta mediterránea, es necesario consumir diariamente frutas y alimentos vegetales frescos sin procesar, a ser posible de temporada y de producción local, siendo la mejor alternativa comprarlos en fruterías y mercados.
Para hacer dieta mediterránea, deben incluirse alimentos naturales y evitar los productos industrializados. De esta forma, conseguimos reducir la producción de toxinas en nuestro organismo, reduciremos también la inflamación y podremos combatir mejor la retención de líquidos, disminuyendo de manera natural la hinchazón.
Es importante incluir pescado en la dieta Mediterránea, consumiéndolo al menos tres veces a la semana, ya que se trata de una gran fuente de proteína y de grasa saludable como el omega-3. Esta alimentación es antiinflamatoria, permite aliviar los dolores en las articulaciones y mejorar la circulación sanguínea. Además, también ayuda a aumentar el colesterol bueno y a disminuir el malo, previniendo de manera eficiente las afecciones del corazón.
Es fundamental también el incluir grasas saludables y aceite de oliva en esta dieta. Este tipo de alimentos ayudan a tu corazón, te permiten controlar el colesterol y te ayudan a prevenir las enfermedades cardiovasculares. Es importante agregar aceite de oliva a las comidas, a ser posible en crudo, consumiendo como máximo dos cucharadas soperas cada día. También son interesantes los frutos secos y las aceitunas, incluyendo de una a dos raciones cada día.
Asimismo, en la dieta mediterránea se debe incluir también alimentos integrales. Entre estos, cabe reseñar los beneficios de la avena, del arroz integral o de los panes integrales saludables. Del mismo modo, otros alimentos como la soja o los garbanzos te ayudarán a fortalecer tus músculos y a mejorar el estado de tu metabolismo.
Las frutas y verduras son clave, no sólo por todos los nutrientes que aportan, sino también porque proporcionan fibras, una buena sensación de saciedad y te ayudan a perder peso.
Por otro lado, además de tener en cuenta estas pautas a nivel de inclusión de alimentos en la dieta, es fundamental valorar que para vivir la dieta mediterránea de manera eficiente también es importante comer de forma pausada, siendo conscientes de nuestra alimentación y compartiendo las comidas con nuestros seres queridos. Además, con la dieta mediterránea se deben consumir al menos dos litros de agua al día, y será fundamental realizar actividad física moderada de forma regular para maximizar todos los beneficios de este estilo de vida.
De hecho, es importante tener en cuenta que la dieta mediterránea no es solamente un tipo de alimentación con el que podemos perder peso, sino que más bien es un estilo de vida saludable que te ayudará a vivir mejor y optimizar tu estado de salud. Entre los principales beneficios para la salud de la dieta mediterránea encontramos un menor riesgo de desarrollar cualquier tipo de enfermedad cardiovascular, diabetes, cáncer o enfermedades degenerativas.
Del mismo modo, la dieta mediterránea también protegerá mejor a tu organismo de otras enfermedades como la trombosis o la aterosclerosis. Es una alternativa económica que te permite ahorrar mientras comes bien y te aporta muchos más nutrientes que los alimentos ultra procesados, aportándote más vitaminas y minerales que estos alimentos.
Asimismo, con la dieta mediterránea disfrutarás de una alimentación mucho más variada, siendo una alternativa muy interesante para los amantes de la buena comida y para los niños, ya que gracias a esta dieta será más sencillo que se acostumbre a comer vegetales, frutas, verduras y ensaladas.
Finalmente, incluimos algunos ejemplos de dieta mediterránea que puedes tener en cuenta. Para tu día a día, si vas a elaborar tus propios menús, puedes comenzar el día con un desayuno saludable compuesto por un vaso de leche desnatada una tostada con pan integral y algo de proteína como un huevo duro o ricotta y una pieza de fruta.
A media mañana puedes tomar un yogurt natural con semillas de chía y para comer, pescado a la plancha con patatas cocidas y una buena ensalada completa será una buena alternativa para cuidar tu salud con la dieta Mediterránea.
Para merendar, puedes tomar un puñado de frutos secos y una pieza de fruta, y la cena puede ser pechuga a la plancha con una buena ensalada y un yogurt o una pieza de fruta a tu elección de postre.
Del mismo modo, debes tener en cuenta que la dieta Mediterránea es una dieta saludable y equilibrada de la que también podrás disfrutar cuando salgas a comer fuera de casa, siempre y cuando selecciones un restaurante de calidad especializado en este tipo de alimentación como Palace Fesol. Si quieres cuidarte todos los días del año, incluso en los días especiales en los que salgas a comer fuera de casa, debes saber que Palace Fesol es un restaurante clave a tener en cuenta especializado en comida valenciana, en el que se saca el mayor partido posible a los productos mediterráneos.
Estos profesionales elaboran platos de toda la vida con los mejores productos de su tierra, cuidando al máximo en la elaboración de los menús tanto el sabor, la calidad y la presentación de sus platos como su equilibrio a nivel nutricional, aprovechando al máximo todos los beneficios de la dieta mediterránea para crear platos de comida especialmente saludables, que no dejan indiferente a nadie y que permiten a los usuarios cuidarse mientras disfrutan de deliciosos manjares elaborados con pescados, frutas, verduras y carnes de la mejor calidad que pueden encontrarse en la zona del Mediteráneo.