Las redes sociales se han convertido hoy en día en una fuente de entretenimiento indispensable para la gran mayoría. Estas nos permiten estar en contacto con amigos, familiares y conocidos, además de conocer gente nueva. Pero, también, nos permiten interactuar con publicaciones en forma de comentarios, gifts e imágenes. Las redes sociales nos facilitan los medios para informarnos de la actualidad, de las noticias, de los contenidos que más nos interesan, etc. Y por supuesto, las redes sociales nos permiten publicar contenido y llegar a miles de personas.
Cada red social tiene su manera de funcionar específica y esta es la que hace que tenga mayor aceptación dependiendo del perfil al cual está enfocada. A continuación, analizamos con más detalle cuáles son las causas principales de la adicción que generan en los usuarios y las consecuencias de su uso prolongado o descontrolado.
Causas de la adicción a las redes sociales
Como comentábamos en la introducción las posibilidades que nos ofrecen las redes sociales son ínfimas. Además, estas están en constante evolución y conforme pasa el tiempo se van adaptando a las exigencias e intereses de los usuarios. Por esta razón nos generan tanta dependencia —sin contar a las personas que trabajan diariamente con ellas o a los responsables de negocios que deben estar atentos a ellas para responder a sus clientes—. Entre las principales causas adicción a las redes sociales nos encontramos las siguientes:
- Gran cantidad de contenidos e información: Tengas un gusto muy específico o no, en las redes sociales encontrarás contenidos sobre tus aficiones, gustos e intereses que te resulten entretenidos. En las redes sociales podemos seguir páginas, cuentas o canales específicos sobre un tema, como el humor, las noticias, los animales, el misterio, la tecnología, etc.
- Continuidad: Los contenidos se muestran de manera continuada. Es decir, no tenemos tiempo para pensar y decidir si queremos dejar de usarla. Nada más acabar un vídeo, por ejemplo, se reproduce otro. Otras veces, con el simple hecho de hacer scroll encontraremos otro contenido que nos llame la atención.
- Interacción y creatividad: Las redes sociales nos permiten interaccionar con usuarios de todo el mundo creando contenidos que serán vistos por decenas, cientos y miles de personas. Además, algunas redes sociales son realmente creativitas en cuanto a la forma de interacción que nos ofrecen.
- Comunicación: Como seres sociales que somos y como el nombre de estas aplicaciones indica, las redes sociales están pensadas para conectar con las personas. Ello puede influir en que pasemos horas y horas conversando con amigos, conocidos o desconocidos. Ahora bien, si queremos buscar una alternativa a este tipo de comunicación que no resulte tan adictiva, podemos utilizar los chats tradicionales, como TerraChat.es. Estos nos permiten conocer gente nueva sin necesidad de pasar horas y horas pegados a nuestro teléfono ya que, entre otras, funcionan mejor con los ordenadores de sobre mesa y por lo general los usuarios invierten menos tiempo en ellos.
Consecuencias de la adicción a las redes sociales
Lamentablemente la adicción a las redes sociales a pasado factura a muchas personas, en algunos casos acabando en verdaderos dramas. Algunas de las principales consecuencias son:
- Desatender otros aspectos de nuestra vida personal: Muchas veces utilizamos de manera tan abusiva las redes sociales que desatendemos otros aspectos importantes de nuestra vida personas, como las relaciones con nuestros amigos, las labores del hogar, las tareas de la escuela o de la universidad, el trabajo, etc.
- Imposibilidad de disfrutar de la vida real: En los casos en los que la adicción es tal, muchas personas son incapaces de disfrutar de una buena conversación, de un paisaje o de una deliciosa comida sin necesidad de hacer uso de su teléfono.
- Distracción: Las redes sociales nos convierten en personas distraídas que están siempre pendientes del teléfono. Ello puede provocarnos desde tropezones mientras caminamos hasta accidentes más serios en los cuales nuestra vida corre serio peligro.
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