Una de las alergias más frecuentes es la de los ácaros. Es frecuente que afecte a toda la familia, pero concretamente es una de las causas de asma más habitual en niños, por ello es tan importante que seamos capaces de evitarla, previniendo su aparición en la medida de lo posible.
A continuación hemos preparado unos consejos prácticos que nos ayudarán a mantener a los ácaros lejos del alcance de los niños y de toda la familia. Los muebles, colchones, sofás, peluches, alfombras y cortinas son los elementos más sensibles a este tema.
¿Qué son los ácaros?
Lo primero que queremos ver es analizar que son los ácaros, porque conociendo un poco mejor su forma de actuar sabremos responder ante ellos. Como decíamos anteriormente son los responsables de gran parte de las alergias que nos afectan. No obstante hay que aclarar que no son ellos como tal, sino que son los restos de ácaros muertos y las deposiciones que éstos van dejando las que provocan las alergias.
Además hay condiciones que hacen que la presencia de los ácaros sea aún mayor. En un ambiente muy húmedo éstos están mucho más presentes y son más dañinos. La época fuerte de su aparición es en otoño e invierno, porque las casas están menos aireadas y con temperaturas más altas.
Lugares más problemáticos con los ácaros
Como decíamos anteriormente, los ácaros se desarrollan más fácilmente en ambientes húmedos y cálidos. Elementos como sabanas, edredones, cortinas, peluches, colchones o cojines son lugares apropiados para ellos.
Los sofás y los colchones son de los hábitats preferidos por los ácaros. Y es que la profundidad del relleno de éstos retiene mucha humedad y crecen a la perfección dentro de ellos. Dentro de ellos cada ácaro produce unas 20 partículas fecales cada día, y los ácaros hembra pueden poner de 20 a 50 huevos cada tres semanas.
Formas de evitar estas alergias
Hasta ahora seguro que has leído que la mejor forma de luchar contra los ácaros es la limpieza, pero debemos aclarar que aunque ésta es primordial, sus efectos no son tan devastadores como son los de la prevención. Soluciones específicas como cubiertas anti-ácaros o productos específicos como Filterqueen se ha demostrado mediante estudios que son más efectivos para minimizar la exposición a los ácaros y reducir los síntomas alérgicos.
Los dos espacios más problemáticos de la casa son la habitación de los niños (la máxima incidencia de las alergias se produce durante la infancia y la adolescencia) y el salón. Cualquier otro espacio de la casa que presente muebles tapizados, alfombras o grandes cortinas también debe ser mirado a conciencia.
En este tipo de espacios prolíficos a la aparición de ácaros es necesaria la utilización productos acaricidas y kits especiales como Filterqueen para contener la presencia de ácaros. La guanina es un producto muy recomendable ya que actúa eficazmente sobre estos microscópicos artrópodos. Cubrir colchones y almohadas con fundas anti-ácaros es imprescindible.
La ropa de cama la lavaremos semanalmente con agua caliente y antes de ser colocada la guardaremos en armarios cerrados. Al limpiar podemos levantar polvo que puede depositarse sobre elementos más apropiados para la vida de los ácaros, así que mucho cuidado con ello. Utiliza un paño húmedo o bayetas especiales para hacerlo. Y en la medida de lo posible evita la presencia de alfombras y de peluches. Las cortinas elígelas de algodón lavable, que es un material muy limpio.