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Nutrición

Nutrición y embarazo

Nutrición y embarazoEstado nutricional y gestación

El estado nutricional es un factor que condiciona, en muchos casos decisivamente, el curso de la gestación. Es sabido que estados de malnutrición y/o carenciales pueden provocar alteraciones en el curso del embarazo; partos prematuros, malformaciones fetales, abortos, incluso algunas situaciones de malnutrición severa pueden llevar a la mujer a situaciones de infertilidad, impidiendo así la fecundación. Todo esto ha llevado a asegurar que es imprescindible un adecuado estado nutricional para asegurar la normalidad en el curso de un embarazo. Actualmente se aconseja, no sólo, que la mujer se encuentre normonutrida en el momento de la concepción sino que durante el embarazo y la lactancia mantenga un nivel nutricional que permita satisfacer las demandas propias y las del feto.

¿Cómo saber si el estado nutricional es el adecuado?

La evaluación del estado nutricional la debe llevar a cabo el médico que sigue el curso del embarazo o el nutricionista y que basarán su diagnóstico en la valoración de los siguientes parámetros:

  • Edad.
  • Peso.
  • Enfermedades crónicas.
  • Consumo de drogas.
  • Consumo de medicamentos.
  • Analítica específica. 

Según el American College of Obstetricians Gynecologists, se han señalado como circunstancias que pueden comprometer el estado nutricional materno:

  • Edad menor a 16 años.
  • Situación económica de privación.
  • Tercer embarazo en menos de dos años.
  • Seguimiento de dieta terapéutica previa al embarazos.
  • Malos hábitos del apetito.
  • Consumo de tabaco, alcohol u otras drogas.
  • Bajo peso al inicio del embarazo.
  • Hematocrito < 33% y hemoglobina < 11 g/dl.
  • Enfermedades asociadas.
  • Ganancia de peso menor de 1kg durante los tres primeros meses de embarazo.

¿Cómo mantener un estado nutricional adecuado?

Un buen estado nutricional se consigue y mantiene haciendo una dieta adecuada en calidad y cantidad de alimentos. Aunque la gestante debe satisfacer sus propias necesidades y las del feto, no es necesario comer por dos, ni siquiera es bueno.

Se recomienda modular, algunos componentes de la dieta:

Energía: se recomienda que en el primer trimestre se aumente en 150kcal diarias la ingesta total, para el segundo y tercer trimestre se recomienda un aumento de 350 kcal aproximadamente.

Proteínas: se recomienda un aumento de 4,7 mg/día que equivale a aumentar en una ración de carne o equivalente la ingesta diaria.

Hidratos de carbono: no se recomienda el aumento en cantidad, sobre el recomendado para una persona adulta, pero si se aconseja vigilar la calidad y su distribución a lo largo del día para evitar situaciones de hiper e hipoglucemia que son muy frecuentes entre las gestantes. Se recomiendan azúcares de absorción lenta (frutas, cereales, legumbres) y también los de absorción rápida: azúcar, miel, etc. sobre todo en el desayuno y en la cena. Además se recomienda tomar de ambos tipos en las cinco comidas.

Lípidos: se recomienda la ingesta en la misma cantidad que las que debe consumir una persona adulta no gestante.

Vitaminas: son nutrientes de gran importancia en el periodo de gestación y es necesario asegurar la ingesta recomendada para adultos. En este grupo, despierta un interés especial, y se está generalizando su suplementación, el ácido fólico. Se recomienda el consumo de 400 ug/día, que es el doble de la cantidad recomendada en una mujer no gestante.

Minerales: del calcio y fósforo se recomienda tomar unos 1200 mg/día. El hierro varía su recomendación dependiendo del trimestre de gestación: durante el primer trimestre se recomienda 0,9 mg/día, en el segundo 4,1 y en el tercer 6,2.

¿Qué ocurre con los suplementos?

Los suplementos de vitaminas y minerales están perfectamente justificados en los estados carenciales, es decir, cuando las gestantes manifiestan un déficit clínico que ha sido detectado analíticamente. En estos casos el médico que sigue el curso del embarazo determinará tanto el tipo de suplemento como la dosis a tomar. En los casos en los que no se manifiesta déficit la suplementación no sólo se hace innecesaria sino que puede resultar perjudicial.

¿Qué debe cuidar, especialmente, la gestante en su alimentación?

Debe realizar una dieta equilibrada. No debe llevar a cabo dietas restrictivas o limitantes que no aseguren los requerimientos nutricionales básicos.

Se deben evitar las situaciones de ayuno, tanto el ayuno temporal como las dietas exentas de hidratos de carbono, ya que pueden provocar situaciones de cetosis (aumentos de cuerpos cetónicos en sangre) que son perjudiciales para el feto.

Se debe tener cuidado con la ingesta de medicamentos y suplementos vitamínicos. En ambos casos sólo se deben tomar las dosis recomendadas por el médico y bajo su control.

Se debe tener cuidado con la ingesta de sustancias no nutritivas ya que pueden interferir en la absorción de sustancias nutritivas.

Se debe tener cuidado con la ingesta de alcohol, tabaco y otras drogas. Es sabido de los efectos perniciosos de cualquiera de ellos sobre el feto: partos prematuros, bajo peso al nacer, farmacodependencias del neonato e incluso malformaciones.

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Categorías: Vivir sano, Nutrición,
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