Utilización de la Cánula de Guedel
La cánula de Guedel es un dispositivo de material plástico que, introducido en la boca de la víctima, evita la caída de la lengua y la consiguiente obstrucción del paso del aire.
El primer paso consiste en elegir la de un tamaño adecuado, que debe coincidir con la distancia que haya entre la comisura bucal y el ángulo de la mandíbula.
Para su colocación el reanimador debe realizar una hiperextensión cervical, abriendo la boca de la víctima con los dedos índice y pulgar de la mano que no sujeta la cánula, y procediendo seguidamente a introducir ésta, rotada 180º con respecto a la que será su posición definitiva, es decir, la parte cóncava dirigida hacia el paladar, girándola progresivamente según se va introduciendo en la boca hasta dejarla en su posición definitiva, evitando en todo momento desplazar la lengua hacia atrás.
Una vez ubicada, el reanimador deberá comprobar su permeabilidad, realizando insuflaciones y comprobando si se desplaza el tórax de la víctima.
El uso de una cánula de tamaño inadecuado o bien su incorrecta colocación tendrían como consecuencia complicaciones que podrían ocasionar a la obstrucción de la vía aérea.
Ventilación mediante Bolsa y Mascarilla
La ventilación con bolsa y mascarilla permite incrementar la cantidad de oxigeno aportada a la víctima: desde un 16-18% del aire espirado, a un 21% del aire ambiente, un 60% si la bolsa se conecta a una fuente de oxigeno y hasta un 100% si, además, se dispone de un reservorio.
La mascarilla se coloca de manera que cubra la boca y la nariz de la víctima, utilizando el puente de la nariz como guía para lograr que su posición sea correcta. El sellado se consigue aplicando sobre la mascarilla el primer y el segundo dedo, en forma de C, y utilizando los otros 3 para mantener la hiperextensión cervical, a la vez que elevamos el borde de la mandíbula.
Una vez conseguido el sellado de la mascarilla, se procede a la compresión progresiva de la bolsa y a su descompresión brusca, para que salga el aire de los pulmones de la víctima.
El reanimador puede ayudarse apoyando la bolsa sobre su pierna o su abdomen, para realizar las compresiones.
En el caso de que sean varios los reanimadores, es recomendable, que uno coloque y mantenga el sellado de la mascarilla, mientras el otro comprime la bolsa con ambas manos.