La artralgia no siempre es fácil de distinguir, sobre todo si tenemos en cuenta de que este problema en muchas ocasiones puede ser confundido con la artritis. Pero no es lo mismo. Si quieres saber un poco más de la artralgia, te invito a seguir leyendo esta guía completa.
Antes de entrar en detalles hay que decir que esta palabra viene del griego, arthro (articulación) y algos (dolor). Esto quiere decir que cuando hablamos de artralgia, estamos hablando de dolor en las articulaciones.
La principal diferencia de la artralgia frente a otras enfermedades de las articulaciones es el dolor. Mientras que la artrosis provoca degeneración de las articulaciones y la artritis provoca inflamaciones. Gracias a estas diferencias es fácil diferenciar entre ambos problemas.
La artralgia puede venir provocada por muchas causas, por lo que pasamos a ver las principales para darnos cuenta de que hay que evitar para intentar no sufrir la artralgia.
La artralgia puede venir dada por heridas, enfermedades infecciosas, tendinitis, traumatismos, esfuerzos elevados, gota, artrosis, artritis reumatoide, cambios de temperatura rápidos o sobrepeso.
Como has podido ver en este listado, las causas que pueden provocar la artralgia pueden ser muchas. Pero si haces un estudio de tu vida, seguro que te será fácil encontrar cual es el problema para poner remedio y por ello reducir los dolores provocados por la artralgia.
Este problema tiene unos síntomas que hace que no sea para nada complicado encontrar que estamos ante artralgia. Si quieres saber si sufres este problema, te recomiendo mirar si sufres alguno de los siguientes síntomas.
El dolor en las articulaciones es el primer síntoma que te indicará que estas sufriendo artralgia. Ten en cuenta que el dolor no cuenta con la misma intensidad en todos los casos, es decir, en algunos casos el dolor se puede manifestar de manera débil y en otros casos se puede manifestar con mayores dolores. En alguna ocasión pueden ser bastante elevados los dolores.
En muchas ocasiones la artralgia también se puede manifestar con hinchazón más el dolor que hemos mencionado anteriormente.
El enrojecimiento de piel es otro de los puntos que debemos destacar dentro de los síntomas de la artralgia.
Muchos de los pacientes que sufren de artralgia también suelen sufrir de rigidez en las articulaciones. Esto en muchas ocasiones se suele traducir en dificultades a la hora de caminar o a la hora de realizar cualquier tipo de deporte que ponga en marcha a las articulaciones afectadas.
En algunas ocasiones también puede provocar escalofríos o incluso fiebre. Eso sí, para que estos síntomas se den, la artralgia tendrá que tener algún tipo de infección. En este caso no dudes ni un solo momento en acudir al médico para que estudie tu situación y ponga las medidas necesarias para que la infección desaparezca.
A pesar de que te vamos a mostrar un listado de tratamientos que te vendrán bien para mejorar los síntomas de la artralgia, lo mejor que puedes hacer es acudir al médico para que te recomiende lo que más te beneficie según tus necesidades. Cuando acudas al médico te recetará algún tipo de inflamatorio como puede ser el ibuprofeno o naproxeno entre otros. La ventaja de acudir al médico es que mirará el problema detenidamente y te dará un tratamiento personalizado a tu problema.
También puede que te mande a un fisioterapeuta para que te haga una serie de trabajos y así los síntomas de la artralgia se reduzcan lo máximo posible.
A la hora de acudir al fisio te darás cuanta de que el mismo usará diferentes técnicas. Para que las puedas conocer, paso a resumírtelas.
La estimulación eléctrica es una técnica que cada vez es usada por más fisioterapeutas. Con este tipo de tecnología se consigue contraer el músculo para evitar que el mismo sufra de atrofia. Normalmente esta técnica se suele usar para la artralgia con dolores localizados, dolores de espalda y la artritis reumatoide.
La crioterapia se basa en el frío para reducir el dolor que produce la artralgia. Eso sí, el profesional controlará el tiempo que estamos en contacto con el frío para evitar otros problemas como daños en los tejidos. Por este motivo siempre debes acudir a buenos profesionales que te garanticen que tu salud está asegurada.
La tracción puede ser otro tipo de terapia que el fisio use contigo para reducir de manera importante los síntomas de la artralgia. Normalmente se suele hacer con el paciente sentado, es decir, podrás disfrutar de una buena comodidad. Recuerda, esta técnica destaca por juntar bien los estiramientos con los ejercicios.
Los masajes también son una técnica que ayuda a reducir los síntomas de la artralgia. Gracias a esta técnica el especialista consigue reducir la hinchazón y el dolor que está sufriendo el paciente. Eso sí, el masaje nunca debe ser dado en caso de que la hinchazón sea elevada o haya algún tipo de infección grave.
La verdad es que un buen fisioterapeuta usará la mejor técnica contigo, de aquí que siempre debas acudir a clínicas especializadas.
Por otra parte, el especialista también te impondrá una dieta para que reduzcas tu peso. Y es que en muchas ocasiones el sobrepeso suele provocar este mal. Además, también se suele recomendar algo de descanso para la persona afectada, sobre todo si la misma trabaja mucho o hace demasiado ejercicio físico.
Las terapias de agua o de calor también pueden beneficiosas, siempre que se hagan con conocimientos y guiadas por un profesional. No cometas usar estos remedios por tu cuenta. Y es que en ocasiones puede que en vez de mejorar los síntomas los empeores.